Por:
María Paz Uguña
Estudiante,
2do BGU
Podríamos hablar de la doble moral, todos estaban
preocupados por el agua, por los cortes de luz o cosas personales; sin embargo,
nunca nos preocupamos o vemos por qué existen esos problemas. Veo que hay mucha
gente que habla del consumismo, aclarando que este escrito no es con razones
políticas, pero, Cuenca, tierra de chiripas para los más finos hipócritas,
hemos podido ver como aman comprar cosas, pero: Tú no lo hagas, matas al planeta. He escuchado que la gente detesta demasiadas cosas, ejemplo: egoísmo,
infidelidad, desigualdad, el bullying, calentamiento global, etc. Pero si ellos
lo hacen: está bien. Dicen no desperdicies el agua, para obviamente poder
bañarse sus 2 horas diarias. Gracia me da la gente que le da asco subirse en un
bus, dicen por la suciedad, aunque respecto a quienes se suben, en su cabeza
ellos valen más que una persona del mercado, haciendo énfasis en su apellido.
El ser humano siempre ha sido doble moral, nadie se salva. Mírate al espejo y dime que no es cierto...