Por: Camila Lojano
Estudiante, Séptimo ¨A¨
Contigo
aprendo muchas cosas, ya vamos un mes de enseñanza. Algunos temas fáciles,
otros no, pero sin duda hemos seguido adelante sin ningún obstáculo. Los días
grises se volvieron más azules con cada día de enseñanza y aprendizaje. Gracias
a su guía muchos vamos a llegar a ser alguien en la vida; gracias a nuestra
maestra por enseñarnos que rendirse no es una opción; gracias a aquellas
personas que nos impulsan a seguir aprendiendo, creciendo y superándonos en la
vida; gracias por ser esa maestra que nos ayuda a interiorizarnos, no solo en
la vida escolar sino también en la vida cotidiana. Ser maestros es un don con
el que no todos cuentan, hay maestros que dejan huella en sus alumnos para toda
la vida. Vida para la cual no estamos preparados como tampoco lo estamos para
dejar de ser niños, pero como todo en la vida tiene su inicio y su final,
nuestro final ha llegado. Es hora de dejar nuestra querida escuela y nuestros
compañeros para empezar a crecer y convertirnos en eso por lo que nuestros
padres y maestros han luchado. Y con el amor y el dolor que esto nos provoca es
hora de decir:
¡Adiós!, ¡Hasta siempre Juan Pablo II!
Camila aprovecha tu séptimo de básica y sobre todo disfruta de la lectura que te abrirá nuevo a horizontes. Felicitaciones
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