jueves, 9 de octubre de 2025

Conoces la historia de un tipo que se lanza de un edificio de 30 pisos, pues esta es... (IV)

 

Por: Jhonny Guamán

Estudiante 3ro BGU

 

Capítulo IV

 

Caminó hasta llegar a unas montañas que parecían que estaban rasgando el cielo. Cerca de ellas escuchó una melodía que lo tranquilizaba, cautivado intentó encontrar de dónde venía esa melodía cuando, de la nada, apercibió un olor… era de comida. Le volvió esa sensación de hambre que había desaparecido, siguió caminando con ansias de comer algo, pues desde que llegó no había comido nada. Siguió la melodía y el aroma lo guio hacia una puerta vieja en medio de dos montañas. Dudó si entrar, sabía que ese lugar no era de confianza. Su mano empezó a temblar, un hombre con velo blanco le tocó el hombro y lo invitó a entrar, se presentó como Virgilio y cortésmente se despidió, se dio cuenta que era un restaurante, no era una casa como pensaba. Sorprendido vio cómo explotó el lugar, se dio cuenta que afuera en el desierto no hacían caso a la física, en el restaurante peor. Mientras caminada vio a aquel genocida…   

 

CUANDO EL MUNDO SIGUE Y TÚ NO

 

Por: Nahín Sánchez

Estudiante 1ro BGU

 

Hubo momentos en los que me sentía completamente mal, pero no era solo tristeza… era como si me estuviera muriendo por dentro. Como si algo me estuviera consumiendo lentamente desde el pecho hacia afuera. Todo me dolía, me costaba hasta respirar. Levantarme era una tortura, y hablar... hablar era como intentar gritar bajo el agua. Todo seguía su curso: la gente reía, los autos pasaban, los días cambiaban, pero yo seguía ahí, atrapado en mi cabeza, en un cuarto sin ventanas, sin puertas, con paredes que se cerraban cada vez más.

Y con el tiempo, entendí algo y es que nadie va a esperar por mí, el mundo no se va a parar porque yo me sienta así.  Nadie va a poner pausa a su vida porque tú estés hecho pedazos. El reloj no se detiene, aunque estés al borde. La vida no frena ni siquiera cuando estás a punto de perderte. Y si no haces algo por ti, el tiempo no solo te arrastra: te sepulta.

Así que borrón y cuenta nueva... o al menos, eso intento. Porque el sol siempre vuelve a salir después de la tormenta, pero a veces lo hace sobre un campo de ruinas. Y en ese caso, uno tiene que aprender a levantarse. No porque los demás no te quieran, sino porque nadie, por más que lo intente, puede cargar con tus demonios. Solo tú sabes lo que pesa tu sombra.

Aprendí que cada lágrima, cada silencio que quema y cada noche donde piensas que no vas a despertar pueden volverse parte del impulso. No el que te salva, sino el que te endurece. El que te obliga a seguir, aunque sea con los ojos vacíos. Porque a veces seguir no es vivir, es simplemente no morir.

 

PROMESAS AL VIENTO

Por: Nahín Sánchez

Estudiante 1ro BGU

 

Cuando heriste mi corazón

no supe en quién confiar,

todas las promesas que me hiciste

se esfumaron sin más que reprochar.

Sabías que me cambiaría, sabías que me haría mal.

Todos mis amigos me preguntaban que qué pasó contigo, por qué te fuiste sin nada arreglar.

Escuchaba canciones tristes, que tal vez me ayudarían a superar, pero todo el tiempo que conmigo estuviste, no se pudo borrar.

Como dice la canción: Can I Call You Tonight?...

Hay veces que uno solo quiere marcar un número,

aunque sepa que nadie va a contestar.

LA REINA DE LAS FRUTAS

 

Por: María Isabella Castrillón Vizcaíno

Estudiante 4to ¨B¨

 

Érase una vez, una gran manzana jugosa que vivía en la cocina de una familia, pero todas las frutas se reían de ella por no ser comida por las personas. Un día, la fresa malvada bajó de la nevera fue y le dijo a la manzana: ¨Tú nunca vas a ser comida, por ser muy gorda y roja, en cambio yo soy más delgada y más jugosa¨.

Luego de unos minutos, llegó una niña de esa familia, cogió la manzana y le dio un buen mordisco y se le cayó el diente. La niña tan asustada corrió donde sus padres para contarles la mala noticia que se le cayó un diente.

Las frutas de la cocina dijeron: ¨¡Ella es la reina!¨, la fresa tan enojada gritó : ¨Ella no es la reina, si fuera la reina, ya lo supiéramos hace mucho tiempo¨.

La niña regresó con un cuchillo y la fresa susurró: ¨Es tu fin manzana¨, pero en lugar de coger la manzana, cogió a la fresa y le quitó sus hojas y la fresa asustada dijo: ¨¡No, mis hermosas hojas!¨ y luego se la comieron.

Y desde día, todas las frutas acordaron que la manzana siempre será la reina.

Moraleja: No te burles de las características de los demás, porque algo malo te pasará.


jueves, 2 de octubre de 2025

ENTRE MIS HOJAS DESNUDAS ESTÁ MI HUÉSPED

 

Por: Emily Piña

Estudiante 1ro BGU

Reportera ¨El Observatorio¨

 

Se sienta en mis ramas, bebe mi savia y, cuando cierro los ojos, lo escucho reír en silencio. Dejé que agujas de abono, líquidos fertilizantes transparentes entraran en mí como rayitos de luz. Entonces volví a sentir el sol, a saborear el agua fresca con mis raíces débiles y dispuestas y cuando por fin mis hojas empiezan a brotar, regresa él sin piedad, como si conociera mis escondites más secretos o mis miedos de volver a tenerlo. Llega otra vez y no me sorprende, con el tiempo aprendí a vivir con él, a hablarle en voz baja, darle mi espacio y mi tiempo. Él se alimentaba de mí y cada victoria de él era apenas unos cuantos puntos para mí por resistir. La desnudes de mis hojas le pertenecen, mis ramas partidas le pertenecen, he aprendido a vivir con él tanto, que incluso mi ausencia le pertenece. Hoy su sombra me cubre totalmente y pienso que la única manera de desalojarlo, es mi ausencia.

LA HORA HA LLEGADO

 

Por: Gabriela Perachimba

Estudiante 1ro BGU

 

El colchón susurra suavemente a mi oído,

hecho un grito y respiro. La hora ha llegado.

Mis manos están frías, me duelen las pupilas.

 

Tengo prisa, no hay tiempo,

él se acerca y no es para algo bueno.

Escucho sus pasos lentos,

pero no lejanos.

El reloj dejó de girar,

ya no hay nada que pueda evitar.

Camino sin dar vuelta atrás, aunque sé que él me detiene,

cada paso se acerca más y mi pulso se desvanece.

 

Estoy muriendo poco a poco

nadie nota mis heridas, esas que sí lastiman,

tenía tantas ganas de disfrutar mi vida.

TU AUSENCIA

 

Por: Melanie Lupercio

Estudiante, 1ro BGU

 

Entonces entendí que no eras para mí, que simplemente tú no eras la persona que yo creí. Tú no eras aquella persona que me quería de ¨verdad¨, que me amaba sin parar, tú no eres aquella persona que yo consideraba alguien especial. No sé qué te pasó o qué me pasó, no sé cómo, de la noche a la mañana, ese ¨te amo¨ se disolvió en el áspero viento, pero está bien ¿o no? Al menos tú estás bien. Yo solo pienso en ti todas las noches, pienso en lo que hubiéramos podido construir, pero ya no se puede y siempre dijiste que si algún día nos alejáramos iba hacer por mí y quizá fue así. Tal vez yo no era la persona perfecta para ti o yo no era esa persona que tanto esperabas, tal vez solo era alguien que tú supuestamente ¨querías¨ para llenar esos vacíos que tenías. Y lo hice, los llené, pero a qué costo… te di todo de mí, ABSOLUTAMENTE TODO… pero creo que eso no fue suficiente para que una persona te ame sin parar y haga todo lo posible para quedarse a tu lado un segundo más…